Producción de Sipsmith

Plantas

Las plantas se consiguen de todo el mundo; solo se eligen ingredientes de la mejor calidad. La receta original de Sipsmith se inspiró en una que encontró el maestro destilador, Jared Brown, en un libro del siglo XVIII llamado “El arte de destilar”. Cada día, los trabajadores de la destilería agregan la cantidad precisa que se necesita para hacer un lote de ginebra en cada alambique.

Maceración

La cuidadosamente diseñada receta se agrega a los alambiques la tarde anterior para que las plantas se maceren durante la noche e impregnen de sabor el baño de alcohol. En general se maceran 14 horas, pero pueden ser hasta tres días en el caso del V.J.O.P

Destilación de una intervención

El proceso comienza con una bebida alcohólica de grano neutro, que se destila a través del primer alambique de Sipsmith que se llama “Prudencia”, que transforma la bebida alcohólica en un vodka suave y mantecoso de cebada. Una vez destilado, la bebida se diluye con agua de manantial y se embotella directamente, o bien se guarda.

El método de destilación de una intervención, que apenas se usa en estos días, significa que la ginebra sale del alambique tal como lo indica la receta del maestro destilador.
 
Luego, la bebida se infusiona con diez plantas, desde casia y almendras españolas molidas hasta raíz de orris y cáscara de naranja de Sevilla, y se deja macerar la mezcla de preginebra por 15 horas. Una vez que los sabores de las plantas han invadido la bebida y esta ha adquirido una nota apenas aceitosa, está lista para destilar.

Se calienta despacio a Prudencia, y la mezcla comienza a vaporizarse y atravesar el alambique de cobre. El hecho de que Prudencia sea de cobre es importante: este metal es el mejor amigo del destilador, reacciona con el alcohol y ayuda a quitar las impurezas persistentes. Esto significa que nuestra ginebra no necesita filtrado, y por lo tanto no pierde su carácter o sutileza.

Una vez que la bebida alcohólica comienza a evaporarse, avanza por el alambique, esquivando la columna de destilación para garantizar que no se pierda la delicadeza de los ingredientes. Al final del proceso se vuelve condensación.

La ginebra resultante se diluye con agua fresca de manantial a un grado de alcohol preciso de 41.6 %, la proporción a la cual el destilador principal Jared Brown consideró que quedaba mejor equilibrada. Solo se usa el “corazón” de lo que se destila, conocido como pasada del medio, y se descarta la cabeza y la cola de la destilación.
 

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